Con estas fotos que nos manda Villaescusa en las que casualmente y en la primera aparece el coche del turno de nuestro compañero Alberto Gutierrez Colilla, queremos finalizar y creemos que de la mejor manera posible, el recuerdo a nuestro querido compañero, pues ha sido su hijo Alberto el que nos ha escrito y creemos que es la mejor manera para despedirle:
Hola, yo soy el hijo de Alberto Gutierrez Colilla, os agradezco muchísimo vuestras palabras y vuestro trato con él, estoy seguro de que mi padre se ha ido con todo el amor del mundo, de sus amigos y familiares.
Te escribo, hoy, porque es mucho más fácil que mirar tus fotografías. Te escribo porque no encuentro la razón de existir. ¿Cómo resistir a la tentación de la muerte? ¿Cómo enfrentar mi vida? ¿ Cómo hago para creer en el mundo, en las personas? En tantas cosas quiero creer, en tantas miradas quisiera ver la mía, en tantos momentos necesito una palabra de aliento, una sonrisa inocente o un simple abrazo. Pero no lo encuentro, no lo encuentro caminando por la calle, no lo encuentro en un libro, no lo encuentro en mi alma.
No te culpo papá, siempre estuviste, siempre cuando lo necesite, siempre vi en tu mirada la mía, siempre encontre tu abrazo. Pero no es lo que necesito ahora, necesito algo que no me puedes dar. Necesito confianza en mi y también en los demás, pero no la encuentro porque no soy lo suficientemente capaz de abrir mi corazón a nadie.Papá me acuerdo de tantas cosas que hicimos juntos, en la playa,en casa, en todos los lugares , Ahora nos has dejado, y todos estamos desolados
Papá como te extraño, te necesito. Ahora solo yo tengo que enfrentar el mundo, Papá voy a dejar de escribir al aire y voy a ayudar a mi familia a salir adelante, para rehacer nuestras vidas...te quiero.
Tu hijo, Alberto Gutiérrez Alonso